De Madrid a Córdoba en tren
Calendario y horarios para viajar de Madrid a Córdoba en tren
La frecuencia de la ruta en tren Madrid-Córdoba es muy alta. En concreto, se sitúa en 13 diariamente, lo cual se debe a que es parte del servicio que une a Barcelona con Málaga. Tiene un precio aproximado de 94,81 €, aunque suele haber tarifas reducidas. El trayecto tiene una duración de 2 h 36 min y el último sale de la estación de origen a las 21:00, mientras que el primero lo hace a las 06:00.
Mostrar descripción completa
La ruta en tren entre Madrid y Córdoba
De la Estación Puerta de Atocha, en la que inicia el trayecto, hasta la Estación de Córdoba Central, en la cual finaliza, hay casi 400 kilómetros. Sin duda, la ciudad de destino es una de las más importantes de Andalucía, tanto a nivel histórico como económico, y para llegar a ella es necesario atravesar Castilla-La Mancha y gran parte de la Meseta Central.
Por suerte, es posible realizar la ruta que separa ambas ciudades utilizando el servicio de alta velocidad AVE. Aunque es posible llevarla a cabo de forma directa, en la mayoría de los casos es necesario efectuar una serie de paradas. Son estas:
- Salida. Estación de Madrid Puerta de Atocha.
- Llegada. Estación de Córdoba Central.
Es cierto que Madrid dispone de dos estaciones de ferrocarriles dentro de su territorio. Son, en concreto, la de Puerta de Atocha y la de Chamartín. Sin embargo, la ruta de Madrid a Córdoba es operada en exclusiva por la Estación Puerta de Atocha, que es la habilitada para el servicio de alta velocidad citado anteriormente. Cuenta con una decena de andenes y ofrece una amplia variedad de servicios a los viajeros. Entre ellos podemos destacar el alquiler de vehículos, el parking privado o las consignas de equipaje, así como las tiendas de regalos, los puntos de venta electrónica de billetes o la conexión a Internet WiFi. Además, está perfectamente acondicionada para satisfacer las necesidades de personas con problemas de movilidad.
Un paisaje digno de contemplar
Una vez que el tren sale de Madrid, los viajeros pueden echar la vista atrás para contemplar desde las ventanas de los vagones la grandeza y majestuosidad de la capital. Un paisaje que contrasta fuertemente con el que está por venir. Y es que, nada más salir de la región y entrar en Castilla-La Mancha, cambia ostensiblemente. En él abundan las praderas y las amplias extensiones de terreno caracterizadas por los colores verde y dorado. Parecen no acabar nunca. Así transcurre el viaje, hasta que el tren se detiene en las históricas localidades de Puertollano y Ciudad Real para, finalmente, finalizar su trayecto en Córdoba.
Los servicios de los trenes que van de Madrid a Córdoba
Los trenes de alta velocidad que realizan la ruta entre Madrid y Córdoba gozan de un gran equipamiento. En primer lugar, conviene destacar que cuentan con una tripulación multicultural, capaz, como mínimo, de atender a los viajeros en inglés, español y francés. Por su parte, los cuartos de baño están acondicionados para personas con problemas de movilidad y disponen de cambiador de bebés.
Especial mención merece el servicio de restauración. A través de él es posible disfrutar de desayuno, almuerzo o cena en función del horario en el que se realice el viaje. También es posible comprar refrescos y aperitivos. Muchos de los trenes cuentan también con un Espacio Club. Está conformado por ocho asientos enfrentados y separados del resto de viajeros. Por ello, es ideal para celebrar reuniones de trabajo o, simplemente, para ir en grupo.
Córdoba, la ciudad de la Mezquita
Córdoba es una de las quince ciudades españolas cuyos centros históricos están considerados en su conjunto como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Algo que no es de extrañar si tenemos en cuenta la gran cantidad de monumentos que posee, el carácter cultural de sus fiestas y su riqueza gastronómica.
La Mezquita, una visita imprescindible
La Mezquita-Catedral de Córdoba es, sin duda, el monumento más representativo de la ciudad. Fue construido en un estilo mudéjar, del cual se ha convertido en icono a nivel mundial. Sin embargo, el paso de los años y de los eventos históricos han supuesto que, en su interior, este se haya mezclado con el barroco, el gótico y el renacentista. En cualquier caso, la perfección de sus innumerables arcos llama la atención nada más entrar.
Hay dos lugares dentro de la Mezquita de Córdoba que merecen especialmente una parada detenida y tranquila. Hablamos, en primer lugar, de la maqsura, lugar que estaba reservado para el rezo del califa. El otro es el Patio de los Naranjos, que da la bienvenida a las visitas tanto al entrar como al salir. Es recomendable comprar la entrada con antelación, ya que suele haber mucha demanda.
Otros lugares y monumentos para visitar en Córdoba
Los encantos de Córdoba no acaban en la Mezquita. Por ejemplo, quienes tienen interés por la cultura árabe están obligados a visitar el yacimiento arqueológico de Medina-Azahara. Está a 8 kilómetros de la ciudad y en él se concentró el poder durante la época del Califato de Córdoba. Sin duda, el Salón Rico es el lugar más famoso aquí. Otra visita imprescindible es el Alcázar de los Reyes Católicos. Desde este lugar dirigieron la ofensiva contra el Reino de Granada y recibieron la petición de Cristóbal Colón para financiar un viaje que, finalmente, le llevó a América.
Dar un paseo por el Puente Romano, tomar algo en una terraza de la Plaza de la Corredera y perderse por las calles de La Judería son también actividades imprescindibles en Córdoba. Otra mención especial merecen los Patios de Córdoba. Son el símbolo de una tradición que consiste en adornar los patios de las casas con plantas y flores de todo tipo al llegar la primavera. Muchos se pueden visitar.
Ocultar descripción completa